Horacio Dileo: “Hemos dado todo, no nos hemos guardado nada”

Alegría y tristeza. Éxtasis y angustia. Las sensaciones que vivió Horacio Dileo, entrenador de Huracán Chubut Volley fueron muchas. Al término del partido y cuando no quedaba casi nadie en el recinto, él estaba allí. Saludando hasta el último empleado del gimnasio, recibiendo el afecto de los hinchas de Bolívar que se habían quedado para brindarle su afecto, ya que el DT es muy querido por aquellas tierras. Y desde luego, respondiendo con un abrazo el cariño de los simpatizantes de Chubut. Con todo eso encima, habló con Jornada y comenzó reconociendo que “a veces es difícil hablar de sensaciones”.
“Yo en lo particular tengo dos sensaciones”, dijo y detalló que “una es de alegría y una de tristeza. La tristeza esta originada en el hecho de perder, cosa que no nos gusta y cosa que nunca pensamos que podía pasar, aún reconociendo al rival que teníamos enfrente. Y la alegría generada en que hemos dado absolutamente todo, en que no nos hemos guardado nada, en que este ha sido un grupo maravilloso, profesional y humanamente y que el premio de la gente hoy (por el sábado) para este equipo sobre todo es el tesoro que nosotros tendremos guardado al final de la temporada. Lo de la gente, hoy y ayer (por el viernes y sábado), en la calle, en los mails, son cosas que no se describen con palabras porque uno no nació acá, entonces son cosas que uno las valore triplemente. Y el reconocimiento de tus rivales al trabajo que hiciste y al rival que fuiste, también es motivo de orgullo.
- Es gratificante, ver como este proyecto a la que le pusieron muchas horas de trabajo tiene este marco…
- Vos (por el autor de esta nota ), que has estado al lado de nosotros permanentemente, sabés que las horas de trabajo no son ficticias. Han sido reales, fueron 9 meses, fueron 37 semanas muy largas, pero realmente volvería a trabajar 37 semanas más, multiplicado por tres con un equipo como este, con un cuerpo técnico como este y hemos tenido un muy buen sustento por parte de la dirigencia. Cada día creo más en la trilogía de los dirigentes, jugadores y cuerpo técnico para poder llegar a logros importantes. Estoy cada día mas convencido de eso.
- ¿Qué les dijiste a los chicos en el vestuario?
- Les agradecí. Soy un tipo profundamente agradecido de estos jugadores, a quienes considero mis jugadores y de este cuerpo técnico a quienes considero mi cuerpo técnico. Les agradecí por tanta hombría de bien y bien entendida. Les agradecí por tanto profesionalismo, pero sobre todo les agradecí por haber sido tan dignos aún en la derrota. Creo que eso nos enaltece aún más como equipo.
- Peleaste mucho tiempo para que la gente se sienta identificada y hoy podemos decir que este es el equipo de Chubut…
- Si, esa pelea siempre la tratamos de librar con las mismas armas. Con trabajo, con profesionalidad, con humildad y la gente sola se va dando cuenta. Más allá del resultado, esto empezó en los cuartos de final con Azul. Nosotros tuvimos dos llaves muy difíciles. Aún ganando, como nosotros le ganamos a Neuquén, fue un rival dificilísimo, un equipo que había sido finalista la Liga anterior y Azul era el rival que justamente yo no quería en cuartos de final. Un equipo muy parecido en el juego y pudimos quebrarlos a los dos de la manera en que lo hicimos. Y ese fue un objetivo interno del equipo, levantar a la gente de su asiento. O sea, el equipo quería que la gente participara activamente, entonces los primeros que teníamos que lograr que esa participación fuera activa, éramos nosotros dentro de la cancha transmitiendo cosas y gracias a Dios fue otro objetivo que pudimos lograr.
- Gracias Horacio…

- Gracias a vos, gracias al Diario Jornada por el acompañamiento de siempre. Y gracias a toda la gente, y no es demagogia, simplemente es un sentimiento. Realmente nos han hecho sentir propios y nos han hecho sentir que esto que hicimos es de todos y no solamente de nosotros.
Foto: Daniel Feldman/Jornada